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2.3 Trabajo colaborativo: Integración de equipos de alto rendimiento en STEM

El trabajo colaborativo es un pilar fundamental en la educación STEM, trascendiendo la mera suma de esfuerzos individuales para convertirse en un proceso dinámico donde los talentos y perspectivas diversas se complementan, impulsando la innovación y la resolución efectiva de problemas complejos. Este enfoque es crucial para replicar dinámicas del mundo profesional y preparar a los estudiantes para los desafíos interconectados del siglo XXI.

La formación de equipos de alto rendimiento, donde cada integrante asume un rol específico alineado con sus fortalezas e intereses, maximiza las capacidades colectivas y fomenta un ambiente de aprendizaje enriquecedor. En estos equipos, el éxito del proyecto no solo depende de la suma de conocimientos, sino de cómo estos conocimientos se entrelazan y se potencian a través de la comunicación y la sinergia.

Roles Clave en un Equipo de Alto Rendimiento STEM:

Para garantizar la fluidez y eficiencia en el desarrollo de proyectos STEM, es recomendable asignar roles que capitalicen las habilidades individuales y fomenten la complementariedad del equipo. Estos roles pueden incluir, entre otros:

  • Director/a de Proyecto (o Gerente de Proyecto): Esta figura es responsable de la gestión general del proyecto, asegurando que se establezcan canales de comunicación claros y precisos, se definan las funciones de cada integrante, y se fomente una participación democrática. El director o directora de proyecto debe elegir el tipo de liderazgo que mejor se adecúe al equipo, gestionando las actividades para el logro exitoso de los objetivos y evitando conflictos. Sus habilidades incluyen la autogestión, la capacidad organizativa y la toma de decisiones responsable.
  • Investigador/a: Se encarga de la búsqueda, recopilación y análisis de información relevante para la problemática a abordar. Su rol es crucial en las primeras etapas del proceso de diseño, evaluando múltiples fuentes de información para seleccionar y plantear la problemática alineada a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030. Debe poseer habilidades de pensamiento crítico y alfabetización de datos.
  • Diseñador/a: Este rol se enfoca en la concepción y bocetado de prototipos preliminares, traduciendo las ideas y la hipótesis de solución en propuestas tangibles. El diseñador utiliza su creatividad para generar soluciones innovadoras.
  • Constructor/a (o prototipador/a): Responsable de la consolidación y materialización del prototipo o producto final, basándose en el diseño propuesto. Este rol implica habilidades prácticas y la capacidad de realizar ajustes y mejoras durante el proceso.
  • Comunicador/a (o Presentador/a): Se encarga de documentar y comunicar de manera clara y precisa la problemática encontrada, su contexto de impacto y la propuesta de solución desarrollada por el equipo. Su objetivo es generar un alto impacto en el contexto social, a menudo a través de presentaciones como el “Elevator Pitch”. Este rol requiere fuertes habilidades de comunicación y la capacidad de transmitir ideas de forma efectiva.

La asignación de estos roles, preferiblemente basada en tests de personalidad o la identificación de talentos, permite a las y los estudiantes concientizar sus propias personalidades y el impacto que pueden tener dentro del equipo. Al fomentar la colaboración, se promueve que se desempeñen de acuerdo con su rol asignado, potencializando el dinamismo del equipo y generando sinergias que permitan hallar soluciones idóneas a problemáticas reales. Esta metodología no solo optimiza los resultados del proyecto, sino que también fortalece habilidades socioemocionales clave como la conciencia de sí mismo, la autogestión, la conciencia social, las habilidades de relación y la toma de decisiones responsable.

En el apartado de “materiales” podrás encontrar una propuesta de test para que lo apliques a tus grupos y formes equipos colaborativos de mayor impacto.